¿Qué es de ti, chiquilla?
que te movías como trapo
y zigzagueabas al primer vaso de vino,
que me esperabas con una sonrisa y un abrazo
en esos días de frío,
cuando fumábamos marihuana
a las 9 de la mañana por las calles solas.
¿Qué es de ti, chiquilla?
Yo ni sé si te amé un ratito
pero es simpática la vida,
los años pasan y ya ves tú,
yo cada vez más excéntrico
y ¿Qué es de ti, chiquilla?
Me acuerdo que tu envoltorio era plomo
y tu carne blanca como pescado,
siempre me pareciste un pescado
y friolenta como saliendo del mar.
Yo no sé si tenías aletas.
Que será de tus sabañones
y tus tetas de mármol,
¿Qué es de ti, chiquilla?
Olías a café y a cigarrillo
y eso que apenas sabías fumar,
eras una niña
eras lesa como tu sola,
te asombrabas de todas mis idioteces,
fuiste capaz, sin embargo,
de escribirme una poesía,
es por eso y solo por eso
sin nostalgia ni melancolía alguna,
sin brillo en los ojos ni inquietud agobiante,
que yo me pregunto ahora
¿Qué es de ti, chiquilla?.